Por qué jugar con botas de agua aunque haga sol

LOS NIÑOS TIENEN QUE PODER MANCHARSE JUGANDO

Antes de ser madre no me hubiera imaginado jamás que en casa usaríamos tanto las botas de agua. Es más, la primera vez que le compré al peque botas la gente me decía que era un gasto innecesario. Total, para los 4 días de lluvia que hay en el Mediterráneo…

Para mi sorpresa, es un calzado que hemos amortizado muchísimo y no porque haya empezado a diluviar a menudo por aquí. Sino porque nuestra forma de entender la infancia y sus necesidades nos ha llevado a ello.

Nada tiene que ver esto con una pedagogía determinada. Siempre defiendo que todos los niños (al margen de la pedagogía educativa que nos parezca más adecuada) tienen una necesidad innata de jugar con agua, tierra, barro y arena. Son los primeros materiales sensoriales que nuestra biología espera tocar y manipular y si les dejáis… veréis que los niños se van directitos a por ellos en cuanto tienen la oportunidad.

jugar con barro 1

Nunca le he prohibido a Terrícola que juegue con agua o tierra. Lejos de importarme que se manche… me encanta ver las rodilleras de los pantalones marrones o verdes, jiji. Pero reconozco que en invierno la cosa se complica, pues con agua cerca siempre acaba chorreando y al final hay que cambiarse de ropa.

Así que poco a poco… empezamos a poner botas de agua casi a diario, aunque hiciera un sol espléndido. En nuestro país, en general, no tenemos la costumbre de que los niños se vistan y calcen con ropa de lluvia… para jugar al aire libre. Pero si queremos que jueguen a fuera con libertad es una idea estupenda.

salir con botas de agua

De nada sirve adaptar los espacios exteriores, reverdecerlos, hacerlos más naturales, incluir agua en las zonas de juego… si vamos a estar continuamente diciendo “no te mojes”, “cuidado que te manchas”, etc.

Si cambiamos una pieza en la crianza o la educación… hay que cambiar muchas otras, es una reacción en cadena. En este caso, si cambiamos los espacios exteriores para “naturalizarlos” también debemos cambiar nuestra mentalidad, aceptando que se van a mojar y manchar (y eso es lo divertido).

Cuestión distinta es cómo nos llevamos los adultos con el barro y por qué nos importa tanto que se manchen. Te invito a reflexionarlo y te hablo de ello en breve, para no hacer este artículo muy largo.

Nosotros, como cuidadores, tendremos que ofrecer las “herramientas” necesarias para que eso suceda de una forma en la que los niños estén cuidados y los adultos en harmonía. Es por eso que usar las botas de lluvia y ropa impermeable para jugar con agua, en invierno, tiene un montón de beneficios: sus prendas vuelven más integras, su confort es mayor al no pasarse el rato de juego chorreando y de repente su creatividad con el barro parece no tener límites.

jugar barro 5Así acaban las botas y la ropa tras un rato de juego a fuera…

Estoy hablando del invierno o cuando hace frío, por supuesto. En cuanto empieza el calor, al menos por mi parte, me parece estupendo que vayan como quieran, que se mojen y se manchen por doquier, jajaja. La misma agua que les moja y mancha les limpiará después! 😉

jugar con tierra 4Los días de calor nada mejor que percibir la tierra con el propio cuerpo…

PONED LAS BOTAS EN LA ENTRADA O RECIBIDOR

Por suerte, cada vez veo en más escuelas que las entradas están llenas de grandes armarios o estanterías repletos de botas de aguas e impermeables… y reconozco que me encanta. Pienso en todos los charcos que saltan esas botas (y no son charcos de lluvia, sino charcos creados por los propios niños para jugar con la arena), en los peques sentados sobre tierra empapada haciendo pastelitos o excavaciones varias… Y pienso: ¡¡esto va bien!!

botas agua escuela

Ojalá pronto sea lo habitual en todas las casas y escuelas. Recibidores con impermeables y botas de agua. 🙂

En mi experiencia en el grupo de crianza compartida lo ideal es que las botas y las prendas que queráis que usen para jugar afuera con agua y tierra estén justo a la salida del espacio, ya sea dentro o fuera. Que sea algo fácil de ver al salir al exterior.

De esta forma es muy intuitivo, al cruzar el umbral de dentro hacia fuera veo mis botas y el impermeable y me lo pongo. Las primeras veces cuesta, después es un hábito (con los más peques es probable que si te despistas… salgan tal cual a fuera, pero poco a poco, jejeje). Lo mismo sucede al regresar a casa o el aula: cruzo de nuevo la puerta, dejo las botas y el impermeable y me voy sequit@ para dentro.

En casa, si tenéis jardín o vais a parques en los que puedan usar agua y embarrarse… podéis aplicar la misma idea. ¡Material impermeable a la salida!

botas en el recibidor

Sé que muchas veces a los adultos nos da reparo que los peques se embadurnen de arriba abajo (te hablaré de ello en breve) pero la verdad es que para explorar el mundo que les rodea los niños necesitan poder experimentar sin pensar en posibles manchas. Por eso lo mejor es que salgan a jugar preparados (ropa vieja en verano, ropa impermeable en invierno) para que nadie les quite la libertad de ensuciarse jugando.

jugando con tierra

Los niños recordarán mucho más los días de barro y juego que las manchas en sus ropas.

Un abrazo,

Clara

Quizás también te interese:

Cómo vestirse cuando llueve o hace frío

Rebozarse en el barro hace a los niños más felices

¡Comparte si te ha gustado!

4 comentarios en “Por qué jugar con botas de agua aunque haga sol”

  1. Hola! te hago una consulta, donde compras los equipos de pantalon y chaqueta impermeable? somos de argentina, y aqui no se consigue algo asi para niños, pero queremos pedirle a mi suegra que es española si quizas ella nos lo consiga por alli… saludos!

  2. Yo trabajo con parques infantiles y en Euskadi es imposible vender una zona de juegos con agua, mira que nos llueve, pero no sabemos jugar con el agua, barro, tierra, todo lo “Sucio” que nos da la naturaleza, no entiendo el miedo a que los niños se mojen y ensucien, yo a los míos les dejaba disfrutar de “ensuciarse” eran momentos divertidos y muy chulos.

    1. Tienes toda la razón Martín. En eso estamos… intentando generar un cambio de conciencia. Es a través del juego que los niños descubren el mundo. Si les limitamos la experimentación del entorno… estamos también frenando parte de su aprendizaje. Yo estoy contigo, que jueguen y se ensucien que es muy divertido!! Un abrazo, Clara.

Responder a Martin Linacisoro Cancelar respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Ir arriba