La maternidad: un baile con el presente

Recuerdo que hace un tiempo abrí un armario de casa y vi un montón de trajes chaqueta, vestidos y camisas colgados de la barra del armario. Era la ropa que llevaba cuando trabajaba en entidades bancarias y despachos de abogados.

armario

Recuerdo que me causó mucha impresión. No sabía si alguna vez más me los volvería a enfundar… Me recuerdo feliz en la época en que los vestía, pero también que recuerdo que esos trajes siempre andaban sin parar.

“Estudia este máster que te abrirá las puertas a un buen despacho”, “Entra en este despacho que en el futuro te permitirá ir a esa otra empresa”, “Estudia inglés que ascenderás más rápido”, “fórmate, trabaja mucho, camina por los largos pasillos a presentar los escritos a corrección”… siempre en movimiento, esos trajes jamás se detenían, siempre iban hacia otro lugar.

Cuando llegó Terrícola a mi vida, cuando llegó la maternidad, esos pasos se detuvieron. Empezó a sonar otra música, otro baile. Y dejé de caminar pensando en el futuro, en llegar más arriba, para bailar sólo con el presente.

Es ahora que Jan es pequeño, es ahora que me necesita, que me quiere a su lado y que me pide que bailemos juntos canciones infantiles o canciones marchosas. A veces bailamos separados y a veces me pide que le coja en brazos y bailemos bien pegaditos.

Con esto no me refiero a trabajar o no, a hacer más o menos horas… sino a estar presente cuando estoy con Jan, sin prisas. Verle, acompañarle, sin que por la cabeza transcurran sin parar listas de la compra, tareas por hacer, etc. etc. Estar despierta cuando las cosas suceden.

Mi decisión personal ha sido aparcar temporalmente el trabajo, sí, porqué los horarios en los despachos no son nada kid-friendly… y no lo quería para mi ni para el peque, pero sobretodo estamos juntos a diario porqué queremos y disfrutamos, aunque haya quién piense que he arrojado años de formación y trabajo por la borda… pero la Clara que soy ahora no se plantea estas cosas. Vivo hoy, porqué el futuro de los niños es siempre hoy, el presente, mañana será tarde (Gabriela Mistral).

Mañana será tarde para darle teta, mañana será tarde para colechar (colechará con otr@s), mañana será tarde para verle crecer, para hacer plastilina juntos, mañana será tarde para leerle cuentos antes de ir a dormir, mañana será tarde para disfrutar de la infancia… será tarde.

Por una vez en mi vida quiero ser puntual, estar en el momento justo en el que las cosas pasan, cuando empieza a gatear, cuando da sus primeros pasos, cuando se duerme sin teta por primera vez, cuando se cae, cuando enferma, cuando se despierta por las mañanas, cuando llora de risa…

Y ESTOY, AQUÍ Y AHORA, DISFRUTANDO A TOPE.

Si mañana sigo aquí… pueda que vuelva a enfundarme esos trajes (si me caben, jajaja), o puede que no, puede que me vista de otra cosa, que me dedique a la jardinería, a la moda, a la repostería… o puede que piense en grande y vuele alto, pero espero no olvidar jamás que vivo ahora, que el futuro es hoy y que mañana será tarde.

¡Disfrutad de vuestros peques mientras lo sean! Y espero que podamos disfrutar todos de nuestros hijos cuando sean adultos también, por supuesto.

carnaval

Termino con esta foto, en la que véis como con la maternidad el color y los disfraces han llegado a mi vida y lejos quedó el armario repleto de negro y gris, jajaja.

Un abrazo enorme,

Clara

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5 comentarios en “La maternidad: un baile con el presente”

  1. La maternidad es del ahora… tan cierto! Me ha encantado la entrada y me siento muy identificada 🙂
    Y me encanta tu blog, la leo a menudo para inspirarme. Gracias!!

    1. Muchas gracias Sofía, me alegro que te haya gustado la entrada y que te inspire el blog. Saber que puede dar ideas o servir a otras mamás y papás siempre anima a seguir escribiendo. Un abrazo guapa, Clara.

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