Parc central de la Sínia en Martorell, el parque de la torre de colores

Hace poco hemos estado en el nuevo parque de la Sinia, en Martorell. Es un parque recién inaugurado que, a mi juicio, tiene bastantes aciertos (y algún que otro inconveniente) y me apetece hacer una pequeña reseña, no solo para darlo a conocer sino, sobre todo, para poder hacer un poco de pedagogía “parqueril” e ir comentando, a través de este parque, cómo deberían ser estos espacios de juego si tuviéramos realmente en cuenta las necesidades reales de la infancia.

UNA IMPRESIONANTE TORRE DE COLORES

Empezaré hablando de la impresionante torre de colores que preside el parque. Es, sin duda, lo más característico del lugar aunque, a mi juicio, ni mucho menos lo mejor.

La torre está compuesta por distintos niveles, cada uno de un color. Y hay que ir trepando por ellos a través de cuerdas, paneles de escalada, escaleras metálicas… para llegar a la cima y poderte tirar por el tobogán que, calculo, tendrá una altura de 10 metros.

Terrícola ha testeado el tobogán y dice que da un ligero vértigo cuando estás arriba y que, al tirarte, es realmente rápido. La verdad, en cuestión de 3 o 4 segundos los niños vuelven a estar abajo de nuevo.

Eso ya me da que pensar. Pese a que es impresionante y realmente la descarga de adrenalina ha de ser genial… Me genera dudas si la inversión compensa los beneficios.

Pero bueno, me parece interesante que de vez en cuando los niños puedan vivir esa experiencia. Aunque no es, para mí, ni mucho menos un elemento necesario en un parque ni creo que todos los parques tengan que tener estos elementos espectaculares. Me parece más una atracción vaya, que no un punto de partida para jugar y moverse al aire libre.

ESTRUCTURAS DE TRONCOS Y SUELOS DE ARENA

Como os decía, más allá de esa torre… Para mí el diseño del parque es bastante acertado. El resto de propuestas son todas realizadas con troncos de madera sobre una mullida base de arena. El parque tiene un arenero pero, hay que decir, que en realidad toda la zona es un gran arenero.

Hay muchas estructuras con propuestas interesantes: zonas de equilibrios, toboganes, todo tipo de columpios… Y mi zona preferida, sin duda, es la que está más apartada de la torre.

Allí hay propuestas más novedosas como una hamaca muy relajante, la verdad, la he probado y confirmo que está genial, jeje. Y además se observan bancos por dentro las estructuras para que los niños se sienten, jueguen, conversen…

Es algo que no estamos acostumbrados a ver en nuestros parques y me parece interesante incluso para niños más grandes, que tienen otro tipo de necesidades y que necesitan espacios de encuentro.

Hay también una preciosa casita de juegos con un interior repleto de bancos y una mesa muy chula en el centro.

VALORACIÓN GENERAL DEL PARQUE

Para concluir un poco esta reseña del Parc de la Sinia, en Martorell, me gustaría contaros mi impresión general sobre el mismo. Y os cuento que, en relación a las estructuras, me parece un espacio muy acertado. Tiene 3 zonas grandes y diferenciadas de juego que, como he ido comentando, creo que cubren distintas necesidades y edades.

Los suelos son de arena y solo hay algo de caucho bajo la zona de la torre de colores. Es un parque de esos que, aunque cerraran las estructuras… Los niños podrían moverse, jugar con el césped, la arena, correr por los desniveles que hay alrededor…

Este parque se enmarca, además, en una amplia zona verde con más de 500 árboles plantados que, esperemos, que puedan crecer tranquilamente y ofrecer un espacio más natural y oxigenado a la ciudad.

Sin embargo, sí observo algún inconveniente y es uno que sucede en todos los parques de nuestro país: la falta de sombras en la propia zona de juego.

Hay muchísimos árboles plantados que son muy jóvenes y todavía tienen que crecer. Así que no dudo que en pocos años la zona de alrededor estará bien sombreada. Sin embargo, en las propias zonas de juego no hay árboles ni tampoco sistemas de sombreo.

Es un parque muy nuevo, ubicado en una zona de nuevas viviendas en construcción. Así que espero que a medida que pase el tiempo y los niños lo usen… Se corrija ese tema poniendo toldos o árboles más cerca de la zona de juego.

Así que bueno, termino ya valorando muy positivamente que se realicen parques de este tipo, que se apueste por suelos y estructuras más naturales, con pluralidad de retos y propuestas para todos los niños. Poco a poco, esperemos, todos los parques vayan adecuándose mejor a las necesidades reales de movimiento y juego de la infancia.

Un abrazo,

Clara

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